Pinceladas de cotidianidad en Mozambique
7/01/2012
Después de una semana visitando diversas comunidades del interior de Mozambique, estoy de vuelta en la civilización en la ciudad de Beira ciudad costera bastante caótica donde mañana asistiré a un worshop de desarrollo de comunidades rurales a ver si puedo aportar alguna cosita… enciendo el ordenador y toma bofetón de realidad, 108 mails!!! Así que después de leer algunos y eliminar la mayoría (ya sabéis basuras varias) he pensado pues ahora escribo yo!
Estoy flipando!!! Este país es increíble!!! Sus gentes son increíbles!!! El hecho de venir con un programa de cooperación, viajar trabajando con juntamente con compañeros mozambicanos y el hecho de que hablen portugués te permite acercarte muuucho a ellos… Me he pasado una semana visitando pueblitos del interior de Mozambique, casas de adobe, baobabs, sonrisas un montón (uno se pregunta por qué nos costará tanto sonreír por allí arriba en nuestro día a día), saludos eternos, millones de estrellas tras la puesta de sol, imágenes que tu retina cree rescatar de documentales de África, sin cobertura de móvil y sin Internet (y sí! se puede sin cobertura y sin internet se puede vivir aunque ya no nos acordemos), monos y mandriles con el culo azul pitufo, pequeños fuegos donde se reúnen las familias a conversar en la noche (sin TV crece la comunicación!!!), occidentales que se han dejado seducir por otros tipos de vida, comida que procede de la tierra, y muuuuchas horas de jeep abarrotado por caminos de arena, carreteras con muchos agujeros y una carretera principal donde en sus márgenes se aprecian gentes que venden cosas muy diversas (gallinas, cacahuetes, caramelos, carbón, periódicos…) y todo el día las uñas negras y los ojos abiertos como platos para no perderme nada de lo que a mi alrededor estaba aconteciendo.
Ni more ni less!!!