El camino hacia la igualdad es un recorrido de larga distancia, por eso es importante que se transmitan de generación en generación los Tres Pasos a seguir para cambiar la realidad.

El primero de todos consiste en ser consciente de los avances logrados; y tras analizar la realidad en la que vivimos, tomar conciencia crítica de lo que aún nos queda por alcanzar.

El segundo paso se basa en de ser capaces de reconocer en nosotros mismos los sutiles matices de la desigualdad. Todos interiorizamos ideas de nuestra socialización, el peligro está en que la naturalización de esta desigualdad conlleva a la inmovilidad social.

Y por último, predicar con el ejemplo mediante una implicación total en la visibilización y denuncia como camino al progreso. Toda una revolución de la vida cotidiana

Tres Pasos

El camino hacia la igualdad es un recorrido de larga distancia, por eso es importante que se transmitan de generación en generación los Tres Pasos a seguir para cambiar la realidad.

El primero de todos consiste en ser consciente de los avances logrados; y tras analizar la realidad en la que vivimos, tomar conciencia crítica de lo que aún nos queda por alcanzar.

El segundo paso se basa en de ser capaces de reconocer en nosotros mismos los sutiles matices de la desigualdad. Todos interiorizamos ideas de nuestra socialización, el peligro está en que la naturalización de esta desigualdad conlleva a la inmovilidad social.

Y por último, predicar con el ejemplo mediante una implicación total en la visibilización y denuncia como camino al progreso. Toda una revolución de la vida cotidiana

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