8M: invertir en las mujeres para asegurar un desarrollo sostenible
7/03/2024
En un mundo que se enfrenta a múltiples crisis que someten a las comunidades a una inmensa presión, lograr la igualdad de género es más vital que nunca.
Garantizar los derechos de las mujeres y las niñas en todos los ámbitos de la vida es la única forma de asegurar el desarrollo sostenible. Uno de los principales obstáculos para lograr la igualdad de género en 2030 es la alarmante falta de financiamiento con un abrumador déficit anual de 360.000 millones de dólares.
¡Es el momento para el cambio! Este 8 de marzo, súmate a la movilización en el Día Internacional de la Mujer bajo el lema “Invertir en las mujeres, acelerar el progreso”.
No dejar a las mujeres atrás
Estas son las cinco áreas que requieren una acción conjunta para no dejar a las mujeres atrás:
Invertir en las mujeres, una cuestión de derechos humanos
La igualdad de género sigue siendo el mayor reto en materia de derechos humanos. Invertir en las mujeres es un imperativo desde la perspectiva de derechos humanos y la piedra angular para crear sociedades inclusivas. Los avances para las mujeres benefician a todo el mundo.
Acabar con la pobreza
Desde 2020, la pandemia del COVID-19, conflictos geopolíticos, desastres climáticos y turbulencias económicas han empujado a 75 millones de personas más a la pobreza severa. Si sigue esta tendencia, 342 millones de mujeres y niñas podrían vivir por debajo del umbral de la pobreza en 2030. Es crucial actuar de inmediato para evitarlo.
Poner en marcha un financiamiento transformador para la igualdad de género
Según estimaciones recientes, el 75 por ciento de los países mantendrán los recortes en el gasto público en 2025 debido a los conflictos y al alza de los precios de los combustibles y los alimentos. La austeridad repercute negativamente en las mujeres, ya que reduce el gasto público en servicios públicos esenciales, políticas de cuidados y protección social.
Avanzar hacia el desarrollo sostenible y una sociedad del cuidado
El actual sistema económico exacerba la pobreza, la desigualdad y el deterioro medioambiental, afectando de manera desproporcionada a las mujeres y más aún aquellas que se enfrentan a múltiples discriminaciones. Los movimientos de mujeres que abogan por modelos alternativos proponen avanzar hacia una sociedad del cuidado que preserve el medioambiente y la sostenibilidad, amplificando la voz de las mujeres.
Apoyar los movimientos que impulsan el cambio
Las organizaciones que defienden los derechos de la mujer lideran la lucha contra la pobreza y la desigualdad. Sin embargo, están abogando y trabajando casi sin recursos, ya que reciben un escaso 0,13 por ciento de la ayuda oficial para el desarrollo.
Fuente: ONU Mujeres
Manos Unidas y su apoyo a las mujeres en el mundo
Formación para la igualdad de la mujer en El Salvador
Las mujeres salvadoreñas han vivido una historia de permanente opresión y de marginación de las políticas públicas, lo cual les ha llevado a condiciones críticas de pobreza y violencia de todo tipo (económica, social, familiar y de género).
Son muchos los factores que influyen en la escasa presencia de la mujer en la toma de decisiones importantes del país: el sistema económico, laboral, cultural y político. El sistema patriarcal está estructurado para negarles oportunidades de desarrollo y bienestar como personas.
Ante este panorama, el equipo Maíz opta por contribuir a la formación de mujeres líderes de comunidades y organizaciones y concienciar a los actores sociales para lograr que ellas adquieran más independencia y conocimientos sobre las causas de la desigualdad y puedan trabajar en la eliminación de esas diferencias en las organizaciones donde participan.
Mejora de la calidad de vida para las mujeres de Maroua en Camerún
Esta intervención se localiza en el barrio de Doualare, en la ciudad de Maroua, (Camerún). En este barrio periférico, los servicios básicos dejan bastante que desear: cortes continuos de luz, (tres días por semana) y el agua llega mal por falta de presión. Cuentan con un centro de salud, pero sin médico y el transporte en el barrio se hace con moto- taxi puesto que no existe ningún servicio de autobuses.
El proyecto se centra en las mujeres con un nivel de vida bajo y con escasa formación por no haber podido asistir a clases ni haber seguido un proceso educativo normalizado. Muchas de ellas han sido víctimas de matrimonios precoces y ya tienen a su cargo, como media, más de siete hijos.
El objetivo del proyecto es mejorar la calidad de vida de las familias a través del aumento y refuerzo del equipamiento para la “Casa de la Mujer”, donde se vienen desarrollando actividades para la generación de ingresos familiares desde hace dos años: un horno para la elaboración de galletas y quince máquinas de coser.Realizan transformación de alimentos, así como corte y confección, teñido de tejidos y formación básica en alfabetización y salud.
Desarrollo de la mujer en el estado indio de Assam
Un desarrollo necesario en una zona donde los trabajadores y trabajadoras de los campos de té trabajan como esclavos por unos sueldos miserables. La precariedad es tal, que obliga a que los niños y niñas se incorporen al trabajo a edad temprana y no puedan asistir a la escuela. En lo concerniente a la salud, la malaria, tuberculosis y disentería son enfermedades habituales.
Nuestros socios locales, los Misioneros de San Francisco de Sales, nos presentan este proyecto dirigido a mujeres tribales cuya situación es muy precaria tanto en el aspecto cultural, como en el económico.
En lo que se refiere a la cultura, el proyecto promueve programas de: empoderamiento, salud comunitaria y educación.
Y en el plano económico se centra en las actividades generadoras de ingresos como son: la preparación de detergentes y jabones, la cría de animales, la fabricación de velas, la horticultura y los preparados y cultivos orgánicos.
Lograr la igualdad de género y el bienestar de la mujer en todos los ámbitos es más crucial que nunca si queremos generar economías prósperas y conseguir un planeta saludable.